Introducción
El Colegio Mozart Schule Concepción fue fundado en el año 2005, impartiendo clases en los niveles Kinder, 1 y 2 Básico. Ha crecido todos los años en un nivel, llegando actualmente a 4º año medio.
El año 2008 extiende sus dependencias incorporando la sede Beltrán Mathieu, en donde está ubicado el Kindergarten, atendiendo a los más pequeños. El año 2010 se amplió la sede Las Vegas con la inclusión de un nuevo edificio de aulas.
A raíz de las peticiones de los apoderados del colegio, se han abierto también niveles para los más pequeños.
Para el proceso de admisión 2012 se extendió la Spielgruppe a niños a partir de los 2 años. Distinguen al Colegio su carácter familiar y el ambiente participativo de la comunidad educacional que generan un círculo virtuoso pionero en la Región.
Nuestra Propuesta
Entendemos nuestro colegio como un espacio en donde los niños y niñas puedan sentirse libres y en casa. Para ello tiene importancia fundamental la convivencia armónica del alumno con su entorno, bajo un concepto de educación integral, basado en el desarrollo de capacidades básicas como la competencia social, el desarrollo del potencial creativo, las aptitudes ético-morales y las capacidades físicas y motoras. Lo anterior implica establecer un ambiente de confianza y armonía, que incentive el aprendizaje, que haga entretenido el aprender, estimulando así el rendimiento escolar. Para lograrlo aplicamos una pedagogía que respeta el proceso de crecimiento y maduración personal de cada niño. A ello se suma el énfasis en las actividades creativas y artísticas: música, artes plásticas y teatro, tanto en clases, como a través de nuestros talleres extraescolares, estimulando el pensar y la participación activa en el proceso de enseñanza- aprendizaje, evitando el tradicional método de enseñanza «escuchar, copiar, memorizar»
De este modo los alumnos y alumnas son guiados a obtener seguridad en sus propias capacidades y su intuición para captar el mundo, para construir sus propias bases morales e intelectuales. Favoreciendo además un permanente contacto con la naturaleza, para conocerla, amarla y respetarla, como también, una educación basada en la diversidad y la tolerancia, abierta a otras culturas, dando cabida a ellas. De ahí la incorporación del inglés (a partir de Pre-Kinder) y alemán (desde quinto básico).
Nuestro proyecto se concibe como un colegio familiar, donde se integran de manera armónica hijos, hijas, profesores y padres, con un máximo de 20 estudiantes por curso, en un ambiente cordial y fraterno.
¿Por qué el Mozart?
El Colegio Mozart-Schule Concepción fue fundado para responder a la necesidad de muchos padres que buscan una educación diferente para sus hijas e hijos. ¿Diferente, en qué sentido? En el sentido de educar a los niños y niñas tanto en su condición de seres espirituales como en su condición de seres intelectuales. En nuestro Colegio deseamos responder a esta necesidad, ofreciendo a los alumnos y alumnas una educación integral, es decir, una formación que comprenda todas las dimensiones de su persona.
La parcelación del ser humano propia de nuestro tiempo, nos tienta a descuidar elementos trascendentales en la formación de los niños y niñas. Así resulta que con frecuencia la enseñanza en los colegios está centrada en el desarrollo de las habilidades intelectuales, en los aspectos académicos y cognitivos del aprendizaje, mientras que todo lo demás, todos esos rasgos que nos caracterizan como seres humanos apenas son considerados.
Queremos expresar claramente que una sólida formación intelectual es absolutamente necesaria, y de una calidad tal que haga expedito a nuestros alumnos y alumnas el camino hacia la Universidad, pero con un énfasis similar en la vida interior de los niños, en su desarrollo como seres espirituales y seres sociales, en su formación valórica, en lo que llamamos Educación del Alma, ya que eso nos parece una condición necesaria para que los niños y niñas lleguen a actuar armónicamente con su ambiente. Por lo tanto se requiere de una pedagogía orientada a promover y estimular estos aspectos en cada alumno y en cada alumna, que contribuya a darle sentido y dirección a su vida de manera responsable. Una pedagogía que prepare al niño para ser una persona armónica, equilibrada y creativa, con una visión madura de sí mismo y de su entorno, y que está consciente de que la vida es un regalo de Dios.
Hemos elegido el nombre de » Mozart » para nuestro Colegio:
Por el énfasis en los aspectos creativos y artísticos del Colegio. Por asociarse a alegría y gratitud de vivir. Por la relación entre su música y nuestra espiritualidad.
¿Qué niños queremos formar?
Los alumnos no llegan al colegio como recipientes vacíos. Son individualidades con un inmenso potencial que se desarrollarán con sus propias aptitudes, inclinaciones, intereses y aún handicaps, y que naturalmente aspiran a seguir su propio camino. Para que este proceso pueda cumplirse en forma óptima, se requiere de modelos adultos competentes, de un ámbito relacional seguro y amable, además de su propio ritmo de desarrollo. Se trata de crear el mejor espacio para un óptimo desarrollo de las capacidades de cada educando.
El Colegio Mozart Schule Concepción pretende formar niños despiertos, curiosos, creativos y entusiastas, seguros de su capacidad intelectual y emocional para asimilar el mundo. Niños y jóvenes que son conscientes de su intuición como mayor herramienta de orientación y que crean en su propia capacidad de juicio, en su personal discernimiento, sin depender de la aprobación de los demás. Eso significa, por ejemplo, saber decir «no», cuando el grupo dice «sí», escuchando la propia intuición. Queremos formar alumnos que aspiren a un mundo más fraternal, que sean sensibles y solidarios, capaces de asimilar las reglas de la convivencia, que descubran su propia responsabilidad en el proceso educativo, que sean capaces de trabajar en equipo y de asumir compromisos estables.






¿Con qué profesores trabajamos?
Educar es un arte, que exige a los profesores una amplia gama de capacidades.
Nuestro colegio reune profesores con una visión integral del proceso educativo, capaces de valorar al niño por lo que es y no por lo que sabe, puede, o tiene; que no vean la educación ligada sólo a los contenidos, sino como una instancia formativa mayor.
Los alumnos requieren de adultos entusiastas que, sin moralizar, aporten una orientación moral.
Sin embargo, más frecuentemente les rodea un entorno orientado hacia la diversión y el consumo, en una sociedad que privilegia lo útil y lo desechable, sin incentivar aquellos ideales y valores que dan verdadero sentido a la vida humana.
Nos parece trascendente que los profesores sepan estimular en los niños un sentido para lo bueno, para lo bello y lo verdadero, respeto a lo vivo, la tolerancia frente a la opinión de los demás, el respeto hacia otras personas y culturas, el amor al prójimo y la disposición para ayudar.
Es necesario que el alumno cuente con modelos que le sirvan de orientación y apoyo como seres humanos, y no solamente como transmisores de información. Eso significa que los profesores deben poseer una visión integral del proceso educativo y que así la proyecten a sus alumnos. El respeto y la autoridad que siente el niño hacia un educador tiene que fundarse en la confianza y no en la posible aplicación de algún tipo de presión.
Mozart Schule Concepción requiere de profesionales cuya formación, entusiasmo y creatividad sea un modelo creíble para los niños. En las palabras del escritor alemán Hermann Hesse: «La teoría pedagógica no garantiza a un educador, si él como persona no constituye un modelo convincente, pues un niño cree más en el ejemplo que en las palabras.»
¿Qué esperamos de los padres?
Educar es tarea común del colegio y del hogar. Ambas instancias deben coincidir respecto a sus valores, métodos, organización y contenidos.
La orientación del colegio debe concordar con la perspectiva de los padres, debe traducir sus expectativas y prioridades respecto a la educación de sus hijos.
Brindar una educación que oriente en forma efectiva, sólo es posible si se cuenta con un alto grado de identificación de los padres con el colegio y su propuesta pedagógica.
Se espera de los apoderados un compromiso con el colegio en términos de colabo-ración y de participación en sus actividades. Para ello es necesario un diálogo continuo en relación a los niños y a las actividades escolares, reuniones de apoderados, permanente consideración del desarrollo de cada niño tanto en términos pedagógicos como en términos sociales.
El colegio, por su parte, estará abierto a sugerencias e ideas nuevas de los apoderados. Además, el colegio quiere ofrecer a sus apoderados un espacio de encuentro, para llegar a constituir una comunidad que pueda compartir excursiones, fiestas y charlas que puedan dar respuesta a las inquietudes educativas más frecuentes de lo apoderados.








